"Soldado de Fortuna", de Alexis Brito Delgado

Título: "Soldado de Fortuna"

Autor: Alexis Brito Delgado
Páginas: 224

Editorial: Dlorean Ediciones

Las aventuras del protagonista de esta novela, Konrad Stark, nos llevan hasta las guerras napoleónicas que acontecieron a comienzos del siglo XIX. En ese tiempo, cuando el militar Napoleón Bonaparte lograba adueñarse de buena parte de Europa occidental y sus conquistas y alianzas se acumulaban, el escritor tinerfeño nos sitúa a un personaje que no entiende de amistades ni alianzas sino de maneras de sobrevivir en un periodo tan convulso como el que se describe.

"Soldado de Fortuna" es una colección de relatos, algo más de una docena, que van avanzando temporalmente al mismo ritmo que las gestas de Napoleón, relatándonos las diferentes maneras que Konrad Stark tiene de ganarse la vida: bandido, asaltante, pirata, etc. Cada uno de los relatos, iniciados con una frase del militar francés, y de longitud bastante limitada, se divide a su vez en tres partes que siempre culminan con el personaje principal triunfante ante el problema que haya tenido durante la aventura que tocase en ese momento.

La narración de "Soldado de Fortuna" adolece, en mi opinión, de cierta pesadez por este planteamiento de pequeños cuentos con una estructura idéntica entre ellos. Y es que, aunque no se repiten de manera continuada, la tramas son fácilmente reconocibles cuando vuelven a aparecer, por ejemplo, una aventura en alta mar. Nombradas estas partes marítimas, cabe decir que las pequeñas lecciones de historia que Alexis Brito introduce en medio de estos pasajes rompen la historia en la que nos encontremos enfrascados junto al bueno de Konrad Stark. Tan pronto podemos encontrarnos en medio de un asalto a un barco en alta mar, como de repente y porrazo enfrascarnos en una pequeña lección histórica, documentada, pero que cambia el registro de manera imprevisible y, en ocasiones, molesta.

Como comentaba al inicio, "Soldado de Fortuna" nos permite acompañar la vida del bravo Konrad al mismo tiempo que Napoleón da buena cuenta de una parte de Europa. Incluso seremos testigos de su final en la isla de Santa Elena, a donde el propio Stark acudirá para conocer de primera mano al legendario personaje. La obra permite al lector, de esta manera, conocer pequeños fragmentos de la historia de nuestro continente, en lo que podría ser la parte más interesante de una argumentación histórica a la que, personalmente, hubiera implicado en mayor medida a Konrad Stark, de manera que fuese algo más que un mero testigo o sufridor de las consecuencias de lo que se viene sucediendo.

De lectura rápida, "Soldado de Fortuna" se queda a medio camino de ser una colección de relatos cercanos al pulp (a pesar de que en ningún caso cuente con elementos fantásticos) o incluso al western y una novela histórica en la que situar a un personaje de ficción. Esta indefinición, así como la previsibilidad de muchos de los relatos y las escasas consecuencias del paso del tiempo sobre nuestro valeroso protagonista hace que la novela quede algo deslucida a pesar del interesante contexto histórico en el que se sitúa y de que el planteamiento inicial me prometía un ameno rato delante del libro.