"Pronto será de noche", de Jesús Cañadas

Título: "Pronto será de noche"
Autor: Jesús Cañadas
Páginas: 256
Editorial: Valdemar


Cuando el fin del mundo parece desatarse, la mayoría de nosotros seguramente cogeríamos nuestros vehículos y nos dirigiríamos a una zona poco poblada, alejada de las grandes urbes. Probablemente ese pequeño pueblo en lo alto de una montaña para el que hay que subir a través de una angosta vía de piedras. O, también, al lado del mar, en una villa marinera que nos pudiera permitir, si así requiriera la situación, subirnos a un barco y alejarnos de la peligrosa tierra.

"Pronto será de noche" nos lleva a ese momento en que ya hemos tomado la carretera de turno a alguna parte. Una autopista al infierno para el que no hace falta llegar al destino para encontrarse ante el mismísimo averno. Y es que cuando el atasco llega a unas cotas de inmovilidad casi absoluta comienzan a aparecer cadáveres dentro de sus coches, asesinados por quien sabe, pero para el que nuestro protagonista Samuel, autodeclarado policía, se erige como investigador. Mientras tanto, de cuando en cuando, la marabunta de coches avanza unos pocos kilómetros ofreciendo a los conductores algunas escenas grotescas que ponen los pelos de punta solo de imaginarlas.

Tras "Los nombres muertos", donde el gaditano Jesús Cañadas nos llevaba de la mano de Lovecraft y otros compañeros a lo largo de una larga (demasiado, de hecho) aventura, "Pronto será de noche" es un cambio de registro absoluto no solo en la trama propiamente, sino también en la forma de escritura. Con frases en general mas cortas, directas y crudas, cercanas a lo que el castellonense Emilio Bueso suele llevar a cabo en sus diferentes libros, Jesús Cañadas logra crear en ciertos momentos esa sensación de duda e incógnita ante lo que esta sucediendo.

Sin embargo, personalmente no he llegado a sentir el agobio y claustrofobia que se le presupone a "Pronto será de noche", eso a pesar de que creo que Jesús ha incluido en la obra todos los elementos necesarios para intentar lograrlo. A pesar de ello, una autopista a cielo abierto no consigue el efecto de lo que David Jasso, por ejemplo, suele perpetrar en sus casas, coches o lugares cerrados donde sitúa los acontecimientos. En este caso, el atasco a cielo abierto no me ha resultado lo suficientemente atrayente y descriptivo como para sufrir con los personajes que se encuentran en esta zona del atasco. Solo la cercanía de la noche, donde todo iba haciendo indicar, cada vez más, que se iba a producir un nuevo asesinato creaba en mi la incertidumbre ante quién iba a ser la próxima victima, y eso a pesar de algunos de ellos me resultaban absolutamente simples y su muerte no iba a suponer un gran susto mas allá del propio descubrimiento de la víctima.

http://meetmrcampbell.com/

Por el contrario, sí me ha resultado altamente efectiva toda la ambientación que rodea el atasco. Áridos terrenos con, incluso, grandes fogatas de cadáveres. Túneles en la mas absoluta oscuridad que se convierten en ratoneras. Pueblos cerca de la carretera prácticamente abandonados y saqueados por todos los que iban quedando bloqueados en ese tramo de autopista. Mientras tanto, un reconocible toro vigila atento desde lo alto de un lateral de la carretera todo lo que sucede en ella. El desconocimiento concreto, tanto por parte del lector como de los personajes de la novela, de lo sucedido hasta llegar a este punto es otro punto a favor, dado que es muy probable que la descripción de este apocalipsis pudiera haber caído en una reiteración de clichés del fin del mundo o resultar poco justificativo de la acción global.

Dicho todo esto, "Pronto será de noche" es una interesante novela negra de terror más o menos agobiante según cada uno, que aúna la sensación de incertidumbre con la sucesión de unos crímenes que finalmente tendrán una clara resolución. Con una ejecución, afortunadamente, mucho más corta que la de su predecesora, Jesús Cañadas regresa con una obra que tiene lugar en un difícil enclave para lograr el objetivo pretendido y que dependerá de cada uno para su completo "disfrute" dado que, en la linea argumental criminal, apenas sorprende.

Comentarios